EHNE-Nafarroa expuso la necesidad de aumentar hasta el 60% las ayudas a la incorporación para favorecer el relevo generacional

Al hilo del anuncio por parte del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente de la creación del denominado Observatorio de precios, EHNE-Nafarroa quiere ir más allá y demandó la creación de la figura del Defensor de la cadena alimentaria durante la reunión que mantuvo una representación del sindicato con el nuevo consejero, Jose Mari Aierdi, el pasado 4 de octubre.

Así, se le expuso que debe aplicarse una redistribución de los márgenes de dicha cadena para que no sea el eslabón del primer sector el principal pagano, lo que no implica que tenga que haber una subida de precios de los alimentos. Del mismo modo, se le transmitió que es urgente desarrollar la ley foral de canales cortos de comercialización para potenciar los productos de kilómetro 0 y las distintas marcas de calidad agrupadas en torno a las IGP y DOs, frente a aventuras como la carne cultivada en laboratorio.

El relevo generacional y la incorporación igualitaria al agro es otra de las grandes reivindicaciones de EHNE-Nafarroa, de ahí que se le trasladara al consejero la necesidad de aumentar el porcentaje de ayudas a la incorporación, pasando del actual 40% a un incremento del 60%, así como la amenaza de la uberización del campo, un proceso que busca concentrar la tierra en manos de unos pocos -grupos financieros y fondos de inversión-, lo que va provocar la pérdida de peso de la agricultura familiar, que no va a poder competir con ellos. En el ámbito de la producción ecológica, el sindicato le expuso que es imprescindibe renovar al alza el convenio con el CPAEN para mantener el sistema público de control ecológico, al mismo tiempo que apostar por proyectos como Ekoalde para la distribución de alimentos, realizando un nuevo convenio adaptado a los retos del futuro e implantación en la sociedad.

Superpoblación cinegética La superpoblación de jabalíes y conejos es otro de los temas que se analizaron, una situación que se tiene que abordar seriamente en el proyecto de ley de gestión cinegética, además de que se deben mantener las ayudas a la ganadería extensiva en la zona de influencia del oso, a la par que se le transmitió al consejero la preocupación existente por el avance geográfico del lobo. Junto a ello, también la exigencia de que los suelos de alto interés productivo y valor agronómico queden fuera de los intereses de las empresas que últimamente vienen impulsando la implantación de macroproyectos de energías renovables. Por último, se trasladó el hartazgo existente en el sector por el considerable aumento de los trámites administrativos a realizar, especialmente en lo que se refiere al ámbito de la PAC, que se va a ver incrementado todavía más con la entrada en vigor del cuaderno digital. Un desmesurado papeleo que hace casi imposible que muchas explotaciones puedan cumplir con los plazos establecidos para dichos trámites.

Potenciar el ecoesquema de pastoreo, el uso de las txabolas de Urbasa y los cercados virtuales

EHNE trasladó la necesidad de empezar de cero con el decreto de agroestepas, contando con el sector