Todos ellos se han producido sobre el rebaño del mismo ganadero
- Maiatzetik hona hainbat hartz eraso izan dira Erronkarin, eta hildako zenbait ardi hil dira
Desde el pasado mes de mayo se han venido produciendo varios ataques de oso en Roncal con el resultado de varias ovejas muertas. Se da la circunstancia de que todos ellos se han producido sobre el rebaño del mismo ganadero del valle navarro. A la espera de los análisis de huellas y pelo, el causante podría ser el mismo animal, un ejemplar joven, de tres años de edad, denominado Beroi, que sería hijo de una camada de tres oseznos que tuvieron Rodri y Sorita, la osa eslovena reintroducida en 2018.
Entre el día 21 de dicho mes y el 1 de junio se registraron tres ataques a su ganado ovino en el paraje de Ezkiturrea, en el término municipal de Isaba, que trajeron como resultado la muerte de seis ovejas. Similares episodios volvieron a repetirse a mediados de julio, con la pérdida de otros dos ejemplares de su rebaño mientras pastaban en la zona de Belabarce. Este ganadero ha capitalizado todos los ataques de oso con muerte de ejemplares ovinos en los últimos cinco años.
Al parecer, este mismo plantígrado habría protagonizado otra serie de acometidas en la parte del Pirineo aragonés, concretamente en los valles de Ansó y Hecho a finales de junio, de ahí que los profesionales del Guarderío de Medio Ambiente estén trabajando para descifrar si en la zona que hace muga de Navarra con Aragón está transitando solo el oso Beroi o está acompañado de algún otro ejemplar.
Poco después de que se produjesen esos ataques, un oso fue avistado a pocos kilómetros de la localidad de Garde por un total de cuatro personas, tres de ellas dentro de un vehículo y una cuarta, un cazador que bajaba andando del monte, concretamente en la pista que se dirige a la ermita de Zuberoa. Una localización poco habitual para el tránsito de este tipo de animales, que suelen esquivar por su instinto el contacto humano y con los núcleos urbanos habitados.
Desde que en 2018 se aprobó y puso en marcha el denominado Plan del Oso, ya se han acumulado un total de 29 ataques en Navarra, 18 de los cuales han tenido como principal afectado al pastor que ahora ha vuelto a ver a su rebaño atacado. Los otros 11 se produjeron sobre animales propiedad de otros ganaderos de Isaba y de Uztárroz, principalmente en primavera y verano, época en la que el oso sale de su hibernación.